viernes, 26 de noviembre de 2010

Testimonio

"¿Dónde te metes Señor? Empieza el día desde muy temprano, a todo correr y no te veo. Qué bien me vendría en el trabajo o en la facultad escuchar tu nombre para santificarme, que falta me hace...

Cuantas veces nos has dicho que va a venir tu Reino, que velemos y oremos porque no sabemos cuándo llegará la hora, ¿y qué hago yo? Seguir corriendo a lo loco por el mundo sin pararme, sin perdonar a los que ofendo.

Intento ser feliz llenando mi brocal de cosas superfluas, sin mirar en el interior de mi alma, donde tú resides. Te hiciste pan partido para ser repartido. Me das cada día la oportunidad de mirar a los pobres a los ojos y ser aliento para ellos. A veces no lo consigo, porque mi egoísmo me ciega.

Entonces recuerdo aquello de... no me dejes caer en la tentación. Y si caigo, levántame, porque sin ti nada soy, y sin ti nada quiero ser."

Javi (Jóven laico Trinitario)

No hay comentarios:

Publicar un comentario